El “sinceramiento” de las tarifas de servicios públicos avanzará inexorablemente en la provincia a la anunciada audiencia del transporte de colectivos para el 26 y 28 de febrero, el último viernes se firmó el decreto por el cual se convoca a la misma instancia para dar el primer paso necesario para subir lo que se abona por la energía eléctrica.
Secheep hará el encuentro que se sabe es no vinculante pero si un imperativo legal, el 29 de febrero desde las 9 en la sede de la cooperativa telefónica de Coronel Du Graty.
La decisión de la empresa provincial se da en un contexto en el cual desde la Nación existe una política de retirar periódicamente o reducir al mínimo el aporte de subsidios, que naturalmente solo puede ser absorbidos vía la entidad o las tarifas y aún cuando todavía no empieza a regir el cuadro tarifario que tendrá un incremento del 34,6% desde los consumos de enero. Es decir aún no se aplica una suba pero ya está en camino otra.
En la empresa sostienen que con lo que pagan hoy los usuarios se hace cada vez más cuesta arriba mantener el servicio ya que lo que se abona está calculado a costos de 2022, cuando desde entonces a esta parte el país soportó una inflación de tres dígitos y el peso se devaluó ante el dólar de forma significativa, moneda en la cual están cotizados insumos y equipos.
A esto se agrega la siempre vigente deuda que tiene Secheep con la mayorista Cammesa, que cada autoridad que llega a la empresa señala que dificulta cualquier intención de equilibrio en las cuentas y los actos de vandalismo que comenzaron a suceder en los últimos que implican el robo de transformadores, que deben reponerse en lo inmediato con costos millonarios para que la reposición del servicio no se demore.
Escenarios
Producto de la decisión del Ejecutivo nacional de aportar menos recursos para subsidios consumos prácticamente consumos prácticamente idénticos se pagan casi el doble. Algunos usuarios ya recibieron los registros de los consumos de noviembre y diciembre de este año, que se sabe estuvieron signados como es costumbre en esta parte de Argentina por las altas temperaturas.
Así, un usuario residencial que en enero de 2023 pagaba poco más de 9000 pesos por 600 kilowats/hora si utilizó una cantidad similar en noviembre desembolsará 16.000. Una suba del 80 por ciento.Todavía resta el incremento del 34 por ciento confirmado y restará ver lo que ocurra con esta audiencia.
Como ocurrió tantas veces lo que vaya a exponerse en febrero no tendrá necesariamente una aplicación lineal ni inmediata.
Dependerá de lo que consideren desde el gobierno de cómo y en qué momento aplicar una medida que se sabe modifica el humor social. Prueba de ello es lo que ocurrió con esta suba que se instrumentará, se definió en una audiencia en febrero y no se puso en práctica por el año electoral que fue 2023.
Diario Norte