Javier Milei viajará este sábado a Nueva York para participar de la asamblea general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El Presidente prepara un discurso con duras críticas contra la agenda 2030 y el globalismo. No tiene una agenda 100% definida y en su entorno no descartan posibles contactos con funcionarios de FMI.
El jefe de Estado criticará a las políticas del organismo internacional de los últimos años y hará foco en el rol que tuvo en la relación con la Argentina. Será especialmente duro con las políticas de género y diversidad y las ambientales.
“Lo que criticamos es que la ONU no nos puede poner las mismas restricciones ambientales que tienen Italia y Alemania. Para poder crecer necesitamos contaminar más y no podemos financiar políticas de diversidad que nos generen un gasto”, expresó a TN un funcionario.
Es por eso que en la Casa Rosada sostienen que Milei buscará impulsar un “frente de resistencia” ante las políticas de la ONU. El Gobierno reconoce como aliados estratégicos a los mandatarios Giorgia Meloni (Italia), Viktor Orbán (Hungría), Nahib Bukele (El Salvador), entre otros.
El Gobierno critica además la composición del Consejo de Seguridad y apunta contra el poder de veto de los cinco miembros permanentes: China, Francia, Rusia, el Reino Unido y los Estados Unidos. Acusa a la ONU además de favorecer los intereses de China.
“No hicieron nada por Argentina y tampoco son efectivos en el ámbito mundial. No nos ayudaron con la ocupación de los ingleses sobre las Islas Malvinas, como tampoco intervinieron en la guerra entre Rusia y Ucrania. Juegan por sus propios intereses y condicionan partidas de crédito de otros organismos”, expresó a TN un funcionario.
Milei viajará a los Estados Unidos acompañado del ministro de Economía, Luis Caputo, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y la canciller, Diana Mondino. La mesa chica del Ejecutivo sostiene que evitarán una foto con el expresidente Donal Trump.
La Casa Rosada asegura que buscará no intervenir en las elecciones de noviembre los Estados Unidos y mantiene la postura de negociar un nuevo programa económico con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El Gobierno celebró la decisión del FMI de desplazar a Rodrigo Valdés de las negociaciones. En la Casa Rosada lo acusaron de filtrar información y de ser un obstáculo para los acuerdos. “Va a haber un diálogo más fluido con Cubeddu”, manifestaron desde Nación.
El Ejecutivo asegura que están las condiciones para negociar un nuevo programa económico con el organismo, pero reconoce que los fondos están lejos de efectuarse en el corto plazo. En Balcarce 50 se habla de materializarlo en 2025.
La mesa chica de Milei mantiene la postura de no impulsar la salida del cepo cambiario hasta que no haya un respaldo fuerte de reservas. Quieren cerrar un acuerdo por U$S10.000 con el FMI y sostienen que el Banco Mundial se comprometió a dar un crédito de U$S2000 millones.
“No vamos a salir del cepo sin tener un colchón de dólares fuerte porque no hay un contexto que lo permita. Es muy probable que haya una corrida si lo hacemos y no queremos trasladar el costo a la gente”, expresó a TN un colaborador cercano al presidente.