El exfiscal federal Gustavo Gómez, especialista en delitos ambientales, analizó la condena firme a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner en diálogo con radio La Red. A lo largo de la entrevista, cuestionó duramente el funcionamiento de la Justicia en la Argentina y el rol de la Corte Suprema en el proceso: “No tengo ningún respeto por ninguno de los tres magistrados porque es ostensible las peleas que hay entre ellos”.
Gómez consideró que el fallo fue parte de un “show mediático”, tanto por su anticipación a través de la prensa como por las reacciones posteriores en defensa de la expresidenta. “Están ocurriendo cosas muy insólitas y esto sin analizar el contenido propio del juicio”, señaló. Y agregó: “Del otro lado también hay mucha hipocresía de quienes hoy se rasgan las vestiduras por esta sentencia”.
El exfiscal recordó que durante los gobiernos justicialistas no se avanzó en medidas que podrían haber evitado esta situación. “Hace dos años atrás esto se podría haber resuelto en el marco del Congreso o del Poder Ejecutivo, como se hizo en la época de Menem con los militares”, afirmó.
Al referirse a las críticas contra los jueces que intervinieron en el juicio, Gómez señaló: “Todos están hablando de que los jueces que juzgaron son corruptos, que debieron apartarse por haber sido parciales”. Según explicó, en estos casos los criterios judiciales están atravesados por decisiones políticas: “Las causas avanzaban o se paraban en función de los vaivenes políticos”.
Sobre el cumplimiento de la condena, expresó que “no es posible atender a una posible libertad condicional si se da una prisión domiciliaria”, porque esa modalidad impide atravesar las cuatro etapas del régimen penitenciario. Y aseguró: “No creo que el Sistema Penitenciario Federal no esté en condiciones de garantizarle a Cristina Kirchner un cumplimiento de la condena dentro de una cárcel común”.
Respecto de los criterios de aplicación de penas, Gómez fue categórico: “El sistema de administración de justicia es un servicio que brinda el Estado, pero es el más caro y el peor de todos. Más del 90% de las causas penales se archivan en la justicia federal”.
También se refirió a la desigualdad en el trato judicial: “Si sos famoso y poderoso te damos prisión domiciliaria, y si no, te mandamos a la cárcel de Río Gallegos”. Aclaró, además, que la prisión domiciliaria por edad “es una decisión del juez, pero no es un derecho del preso”.
En otro tramo de la entrevista, Gómez defendió la necesidad de reformar la Justicia: “Soy fanático de la democratización del Poder Judicial. Cuando votamos delegamos poder en legisladores y gobernantes, pero no en jueces ni fiscales”.
Gómez destacó ejemplos internacionales como los de México, Estados Unidos y Chile, donde se han impulsado mecanismos democráticos de control y renovación de los funcionarios judiciales. “Los jueces y los fiscales se eternizan en los cargos. La Constitución dice 75 años como tope, pero no hay control ciudadano sobre su desempeño”, afirmó.
Por último, advirtió sobre el impacto institucional del caso de CFK: “Con este tipo de fallos, lo que se pone en riesgo es el sistema democrático”. Y reclamó que la Justicia avance “con la misma celeridad” en las causas que involucran a otros expresidentes e incluso al actual mandatario.